Quizá para muchos, el término “continuidad de negocio” siga siendo bastante ajeno o algo difícil de definir y contextualizar, por ello desde Replicalia intentaremos arrojar luz sobre este concepto que acerca a las empresas a la eficiencia tecnológica.
Podríamos simplificar la idea de continuidad de negocio diciendo que se trata de saber cómo actuar en caso de que ocurra un desastre o una catástrofe en tu empresa y realizar pruebas previas para que el día que tenga que aplicarse, todo funcione como está establecido.
Si nos fijamos en las normativas internacionales, veremos que a priori son muchos los pasos que hay que seguir y hemos querido simplificarlo para demostrar que no es tan complicado asegurar los datos de tu compañía y garantizar su recuperación en caso de que sea necesario.
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Identificar qué servicios son los más críticos y determinar cuánto tiempo podrías estar detenidos sin que causase un problema irreversible en nuestra empresa.
- Una vez determinado el tiempo, dejamos claro qué se puede hacer con la tecnología disponible y con nuestros empleados para conseguir reanudar el trabajo en un tiempo menor al considerado como alarmante.
- Realizar pruebas anuales para ver que nuestro plan funciona e identificar aquellos puntos que son mejorables y actualizar el plan.
La clave de estos 3 puntos se encuentra en cómo conseguir recuperar toda la información crítica y que es necesaria para seguir trabajando, antes de que sea demasiado tarde, y para ello, contar con un servicio de Disaster Recovery es fundamental para asegurar la recuperación en el tiempo estipulado.